Nos encantaría poder ayudar a nuestros lectores a conocer Cantabria recorriendo sus paisajes eligiendo los productos más destacados de cada zona de la región y confeccionando con ellos una serie de recetas algunas pertenecientes a la memoria popular y otras de reciente creación.
INGREDIENTES (4 PERSONAS)
250 Grs. de Quesucos rallados de Liébana
150 Grs. de Queso ahumado de Aliva
Pasta Brick
4 Palillos largos de madera
2 Lonchas de cecina
1 Tomate grande de Isla
4 cucharadas soperas de Azúcar
300 Cl. de Nata liquida para cocina
PREPARACIÓN:
Ponemos un cazo al fuego e incorporamos la nata y los quesucos rallados, rallando también la mitad del queso ahumado de Áliva.
Con una varilla de cocina mezclamos el contenido hasta conseguir una crema suave y lo retiramos.
Con la pasta Brick realizamos cuatro cortes introduciendo dentro de cada uno de los cuadrantes un trozo de queso ahumado de Aliva doblando la pasta Brick sobre sí misma para conseguir que el queso quede totalmente tapado. A continuación lo cerramos con el palillo.
Colocamos un cazo al fuego con agua. Cuando esté bien caliente introducimos el tomate y lo dejamos cocer hasta ver que empieza a separarse la piel. Lo sacamos del agua caliente, retiramos la piel, así como el corazón del tomate y lo picamos poniéndolo en un cazo con el azúcar.
Ponemos la mezcla al fuego y lo dejamos cocer a fuego lento durante media hora, hasta crear una compota.
Freímos los paquetitos de queso hasta que estén dorados, escurriendo el sobrante de aceite.
MONTAJE:
En un cuenco o plato hondo colocamos en el fondo la crema de quesucos (caliente). Sobre ella el queso frito con el palillo así como una cucharada de la compota de tomate y un trozo de cecina, y ya tenemos el plato listo para servir.